El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, reafirmó su respaldo a la labor del Comisionado Iván Velásquez al frente de la CICIG para continuar la lucha contra la impunidad en Guatemala.
“Es indispensable transformar las instituciones de justicia”
Guatemala, diciembre 12 de 2016. En la conmemoración del “Día Internacional contra la Corrupción” (9 de diciembre), el Comisionado Iván Velásquez Gómez destacó que para avanzar en la lucha contra este problema es fundamental contar con un sistema de justicia moderno e independiente al que accedan los profesionales más capaces y honestos.
El jefe de la CICIG abordó este tema en una conferencia de prensa, en la cual también participaron: Rebeca Arias, representante residente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y Coordinadora Residente de las Naciones Unidas para Guatemala; y Enrique Marín, Gerente de País de la Oficina contra la Droga y el Delito de las Naciones Unidas (UNODC).
Lucha por la vida digna
En su mensaje el Comisionado señaló que la lucha contra la corrupción permitirá
construir el país que anhelan los guatemaltecos. “La lucha contra la corrupción es la lucha por la vida digna, y por la vida digna de todos, no de un sector de la sociedad. Interiorizar un mensaje de esta naturaleza tiene que llamar a trabajar con mucha mayor decisión, con mucho mayor entusiasmo, pero también la lucha contra la corrupción es la lucha para la construcción del Estado social y democrático de Derecho”, afirmó.
Resaltó que este problema no debe examinarse sólo en la cantidad de dinero que es malversado o apropiado por los sectores de poder, sino que también debe existir la necesidad de edificar las bases para la construcción de una ciudadanía participativa. “La lucha contra la corrupción tiene que aprovecharse en ese proceso de construcción de ciudadanía, un país con una nueva ciudadanía que reclame, que reivindique, que construya, es lo que permitirá que Guatemala surja y que se pueda consolidar todo lo que se ha generado desde abril del 2015”, aseveró.
Advirtió que los sectores que se han visto afectados judicialmente o que se sienten amenazados pretenden intensificar los ataques contra quienes están actuando en la lucha contra la impunidad y la corrupción en el país, para evitar que la justicia avance porque “saben que si logramos consolidar esta lucha, los días de disfrute de ellos están contados”.
“Tenemos que lograr que la lucha contra la impunidad llegue a puntos de irreversibilidad, que se consolide de tal forma que ya todos estos sectores tengan una imposibilidad absoluta de volver al pasado. Por ello, también nos hemos comprometido por la reforma constitucional del sistema de justicia, porque la lucha que venimos sosteniendo, respaldando esta reforma constitucional, hace parte también de la lucha contra la corrupción”, expresó.
Afirmó que no era posible continuar avanzando en la lucha contra la corrupción si no se cuenta con un sistema de justicia moderno e independiente al que accedan los profesionales más capaces y honestos. Por esa razón, dijo, se debe contrarrestar la interferencia de magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), hacia magistrados y jueces de un nivel inferior. “Y una forma de contrarrestar esa injerencia, de luchar por la independencia interna del Organismo Judicial, es suprimiendo las funciones administrativas que tiene la Corte Suprema de Justicia; que la designación de jueces y magistrados esté fuera del alcance de la Corte y que haya un órgano especializado en realizar esas actividades”, aseveró.
Recordó las críticas contra la CICIG por el apoyo a las reformas constitucionales para el sistema de justicia, lo cual no tiene fundamento porque el mandato es claro en señalar que la CICIG está facultada para acompañar este tipo de procesos.
“Si efectivamente se quiere luchar contra la corrupción, si efectivamente la lucha contra la impunidad es una bandera del Estado y de la sociedad, es indispensable transformar las instituciones de justicia, modernizar las instituciones de justicia. Y si a nosotros se nos ha conferido la tarea de luchar contra las estructuras criminales, de identificar, desarticular, perseguir y buscar la garantía de no repetición de estas estructuras de alto poder, que tienen capturado al Estado de Guatemala, necesitamos una base normativa que permita esa lucha contra la impunidad”, enfatizó.
Por ello afirmó que una parte esencial de esa base normativa es la Constitución política, y “una parte de esa Constitución política es el sistema de justicia, y una parte esencial del sistema de justicia es garantizar la independencia de los jueces y magistrados. Por esta razón, nosotros como Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala estamos íntimamente vinculados, y asumimos el costo que tengamos que pagar, asumimos la defensa de la reforma constitucional del sistema de justicia”, recalcó.
“La lucha contra la corrupción no es un fin en sí mismo, estamos contribuyendo con la ciudadanía guatemalteca, con el Estado guatemalteco, al fortalecimiento de sus instituciones porque nosotros como latinoamericanos tenemos una aspiración muy vieja, pero siempre presente: estamos comprometidos con estados sociales democráticos de Derecho en nuestras regiones”, puntualizó.
Alto costo
Enrique Marín, Gerente de País de la Oficina contra la Droga y el Delito de Naciones Unidas, destacó que este país está concientizado de que la corrupción afecta la salud, la educación, la infraestructura y la seguridad de las naciones.
Compartió el mensaje del Director Ejecutivo de UNODC, Yury Fedetov, del cual resaltó que “la corrupción es una amenaza directa contra la inversión e infraestructura, no discrimina e impacta a países ricos y pobres por igual, pero los que sufren son las personas más vulnerables y débiles”.
Agregó, que si todos los sectores de una sociedad no se unen, se arriesgan a que se frene el crecimiento económico y la prosperidad de un país. “La corrupción también corroe la credibilidad y la confianza de la legalidad del sistema de justicia y desperdicia recursos valiosos”.
Estados débiles
En su intervención Rebeca Arias, representante residente del PNUD y Coordinadora Residente de las Naciones Unidas, recordó que en el 2003 la Asamblea General de la ONU aprobó la convención de la lucha contra la corrupción, vigente desde el 2005, y la secretaría fue asumida por la Oficina contra la Droga y el Delito (UNODC). También la Asamblea decretó el 9 de diciembre para conmemorar la lucha contra la corrupción a nivel global.
“La corrupción debilita a los estados, que se traduce en la debilidad democrática de los países; el costo de la corrupción es muy alto. Datos del Banco Mundial indican que sólo en sobornos se estima un billón de dólares que se pagan durante el año; los robos a consecuencia de la corrupción se estiman en 2.5 billones de dólares, que representan alrededor del 2.5% del Producto Interno Bruto global; la corrupción representa en muchos países montos muy superiores a la cooperación que reciben los países en desarrollo”, comentó.
Agregó que este problema también impacta en el área social porque sus costos repercuten en la capacidad de los estados de brindar mejores servicios a sus ciudadanos en lo social, en educación, en salud, en nutrición y en el tema de agua y saneamiento. “Esta lucha contra la corrupción es una lucha que todos debemos enfrentar, no sólo los gobiernos sino también la sociedad civil, el sector privado y las organizaciones internacionales”, recalcó.
Conversatorio
Posteriormente a esta actividad se realizó un conversatorio con jóvenes sobre este tema, en el cual participaron: el Comisionado Iván Velásquez, Oswaldo Samayoa y Lucía Ixchiú. Los moderadores fueron los periodistas Otto Ángel y Ben Kei Chin, quienes preguntaron a los invitados ¿Qué es la corrupción? ¿Cuáles son los tipos de corrupción? ¿Qué casos de corrupción han existido en Guatemala?, entre otras preguntas.
Apartado Postal 934 "A" Guatemala, Guatemala, C.A.
Sobre Guatemala
La República de Guatemala, un país montañoso que se encuentra en el Istmo Centro Americano, tiene una población estimada de trece millones de habitantes.
Guatemala obtuvo su independencia en 1821, después de casi tres siglos de dominio colonial Español.
La República de Guatemala, un país montañoso que se encuentra en el Istmo Centro Americano, tiene una población estimada de trece millones de habitantes.
