COMUNICADO 003
El Juez Miguel Ángel Gálvez del Juzgado de Mayor Riesgo B decidió ligar a proceso a Haroldo Mendoza Matta por un nuevo delito de asesinato relacionado con la masacre de siete personas ocurrida en la aldea Valle Nuevo, municipio de Morales –Izabal- el 14 de noviembre de 2014.
En la audiencia de nuevas imputaciones realizada el día de ayer, el juez encontró indicios suficientes para ligar a proceso a Mendoza Matta y ordenó que se continúe la investigación del asesinato de: Gonzalo López Méndez, de 65 años, agricultor; su hija Blanca Estela López López, de 16 años; la pareja de esta, Orvin Omar Castillo Genis, de 19 años; René Ariel Pérez Gónzalez, de 19 años; Gudiel Humberto Pérez Gónzalez, de 17 años, hermano de René Ariel; Marcos Pérez Gónzalez, de 23 años, hermano de los antes referidos; y José Víctor Pérez Nájera, padre de los tres hermanos mencionados. Al momento de los hechos las víctimas presentaban heridas de arma de fuego de diversos calibres, en la cabeza y otras partes del cuerpo.
Durante la audiencia, Mendoza Matta dijo conocer a los sindicados Ricardo Suñe Girón, Jimmy Oliva -su empleado- y Jerzi Natael Velásquez Alvarado, como su jefe de seguridad.
Estos asesinatos se agregan a otros delitos imputados a Mendoza Matta: asociación ilícita, dos asesinatos, allanamiento con agravación específica, robo agravado, conspiración para el robo agravado y secuestro.
La Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) apoya a la Fiscalía Especial contra la Impunidad del MP en esta investigación.
Antecedentes:
La investigación de esta masacre detalla el hallazgo de tres cadáveres en una vivienda ubicada en la aldea Valle Nuevo (López Méndez, López López y Castillo Genis), a unos 25 metros de dicha vivienda se ubica el cuerpo de René Ariel Pérez González. En un camino de terracería que conduce a la aldea Virginia, y a seis kilómetros aproximadamente de la escena de los cuatro homicidios mencionados se ubica el cuerpo de Gudiel Humberto Pérez González. En tanto que los cuerpos de Marcos Pérez González y de José Víctor Pérez Nájera son ubicados en la aldea Navajoa, a unos 18 kilómetros aproximadamente de la aldea Valle Nuevo, con las extremidades atadas y heridas de arma de fuego en la cabeza.
La investigación evidencia que el motivo de los homicidios fue el hurto de pavos reales, presumiéndose que los integrantes de la familia Pérez (padre y tres hijos) concurrieron a identificar la vivienda de la familia López a los hombres armados que llegaron a dicho lugar, los cuales pretendían recuperar unos animales que les habrían sido hurtados.
El hurto de dichos animales, y las diligencias que Ricardo Fermín Suñe Girón alias “cubano” estaba realizando para su recuperación y/o identificación de los autores del hecho, eran de conocimiento de Jerzi Natael Velásquez Alvarado y Haroldo Mendoza Matta.
En el mes de noviembre de 2014, Mendoza Matta y Velásquez Alvarado fueron ligados a proceso por los delitos de asociación ilícita, dos asesinatos, allanamiento con agravación específica, robo agravado, conspiración para el robo agravado y secuestro.
En su momento el Comisionado Iván Velásquez Gómez destacó: “esta no es una banda cualquiera, es un ejército privado en Izabal que tenía azotada a la población”.
Días antes y en una operación coordinada entre la CICIG, la Fiscalía Especial contra la Impunidad del Ministerio Público y el Ministerio de Gobernación, se había dado captura a Mendoza y Velásquez junto a la estructura criminal liderada por el primero, la cual se dedicaba a realizar patrullajes, control de entrada y salida de personas, vigilancias periféricas, y delitos como homicidios, quema de cosechas, robo y matanza de semovientes, allanamientos a domicilios, matanzas y desapariciones de personas y despojo de tierras en los departamentos de Izabal y Petén.
El juez Gálvez otorgó 3 meses para completar la investigación.