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La ética es un valor fundamental para combatir la corrupción que prevalece en muchos países de América Latina, señaló Francisco Dall´Anese Ruiz, Jefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), en la inauguración del IV Seminario Regional sobre Ética.
Esta actividad fue organizada por la Sección de Asuntos Públicos de la Embajada de Estados Unidos y en coordinación con instituciones guatemaltecas, en la cual participaron operadores de justicia de este país y de Puerto Rico.
Los propósitos del seminario fueron proveer de información actualizada sobre el combate a la corrupción y en pro de la transparencia, fomentar un intercambio cultural entre los dos países y lograr estrategias para combatir ese flagelo.
“Se cae en la corrupción si no se cumple la Ley, la cual es la ética de un Estado; la Ley se me impone, y si no la cumplo se me sanciona en los tribunales penales”, aseveró el Comisionado. Expuso que son diferentes los valores que aceptan las personas que trabajan con la Ley en comparación con los que tienen antivalores y sólo laboran según la conveniencia de un Estado.
“La ley se ha de cumplir aunque se caiga el cielo, y es la única forma en que todos podemos convivir, porque si yo puedo decidir cuándo aplico la ley y cuándo no, entonces no hay seguridad jurídica y se genera impunidad que está asociada con la corrupción”, enfatizó el jefe de la CICIG.
Por ello, el Comisionado agregó que la equidad es lo primero que se requiere para que haya justicia en caso de violaciones a la ética del Estado, es decir las trasgresiones a las normas jurídicas, las cuales fueron aprobadas para que se cumplan.
“Si los jueces no aplican las sanciones cuando tienen que resolver algún caso, entonces la ley es letra muerta; si la Policía no actúa por temor o porque no quiere meterse en problemas, entonces hay corrupción porque no se está cumpliendo la Ley”, expresó.
A criterio del Comisionado, a la par de una sanción penal cuando no se cumplen las normas debe ir un castigo ético, el cual sería el repudio de los actos de la persona que trasgredió la ley.
“Se tiene que tener claro que no podemos prodigar el mismo respeto a un ciudadano que ha trasgredido las normas (…). La única ética que debemos asumir es la de las normas jurídicas, si queremos construir un Estado en donde se respete la igualdad y que las oportunidades sean igual para todos; si queremos el bien común y tener una esperanza de desarrollo humano, la ética estatal es la que debemos asumir”, puntualizó.
Hacer lo correcto
Para Guillermo Somoza Colombani, Secretario de Justicia de Puerto Rico, la ética no se transforma ni admite puntos medios: “Uno es o no, ético; cuando tenemos ética somos mejores personas y servidores públicos, somos guardianes celosos de nuestros principios éticos, lo cual nos hace un mejor pueblo y mejores abogados”, manifestó.
Agregó, que este valor mide el desarrollo técnico y normativo del derecho de cada pueblo, y aseguró que este tipo de actividades coadyuva a ser mejores servidores públicos.
Carlos Méndez, alcalde del municipio de Aguadilla, Puerto Rico, opinó que la ética es hacer las cosas correctas: “Si se toma en cuenta este valor se puede eliminar la corrupción que afecta a muchos países del mundo”. A su criterio dijo que la corrupción se puede eliminar, pero se tiene que hacer con ejemplo, limpieza, rectitud y que un funcionario público tiene que ser el mejor obrero de su comunidad.